Por la mañana: primer día en la UAM.
El Cercanías, único medio de llegar a Cantoblanco desde el centro.
El billete cuesta 1.5 €.
Uno de los paisajes visibles casi llegando al campus Cantoblanco, cuando el tren ya ha salido de los túneles.
Interior del Renfe-Cercanías. Hasta ahora no lo he visto saturado.
Otra vista del interior del tren Cercanías.
Una de las calles del campus Cantoblanco. Los sucesivos puentes que se ven sobre la calle son de diversas facultades.
La fisonomía característica de los edificios del campus.
La niebla inundaba la mañana.
Hacia el medio día la niebla se hizo aún más densa.
En las áreas verdes (tipo reserva ecológica) la niebla era impresionante....
... al menos para mí.
... al menos para mí.
El Rectorado de la UAM.
Una escultura.
La Facultad de Formación de Profesorado y Educación
(donde tomaré mis clases).
El edificio azul de la izquierda es la de Filosofía y Letras, a la que está oficialmente adscrito el programa de doctorado.
Creo que la arquitectura no es el fuerte de Cantoblanco.
Una de las salas de La Invención del Siglo XX: Carl Einstein y las vanguardias.
De regreso me equivoqué de dirección: la estación El Goloso, que parece estar en medio de la nada...
... salvo por la presencia de la sidrería La Pantxorga, que parece ser -o haber sido- un lugar famoso de comida vasca.
Esperando en el andén.
En algunas estaciones de metro y tren están estos trastos dispensadores de libros de moda.
Por la noche, un vistaso al Museo Reina Sofía
Rumbo al área de instalaciones encontré este metrónomo gigante (reproducción a escala del Objeto indestructible de Man Ray), ahora lucho contra el irrefrenable -y estrictamente insaciable- deseo de poseerlo.
Me sentí muy emocionada, no imaginé que vería in vivo este Retrato de Miró que tanto me gusta (el marco me ha parecido tan incongruente...).
Sin marco está mucho mejor.
Detalle de El gran profeta, de Pablo Gargallo.
Un Oso Polar (1931) de Emiliano Barral.
La escultura de granito formó parte del Pabellón Español en la Exposición Internacional de París de 1937.
La colección permanente comprende una expo sobre el pabellón español el 37, en ella hay una colección de carteles reunidos en torno al concepto el arte de la guerra.
Para contextualizar -espero- hay una minisala de tema falangista, de este cartel me llamó la atención el sello (a la derecha el detalle).
Para contextualizar -espero- hay una minisala de tema falangista, de este cartel me llamó la atención el sello (a la derecha el detalle).
El resto de los carteles son de factura republicana.
