Explorando el extremo norte de la línea C4 del Cercanías fuí a dar a Colmenar Viejo, hay algunos paísajes bonitos en el camino, pero llovía:
Cuando llegué a la estación comenzó a nevar.
Como la ventisca se puso más o menos fuerte, no me quedó más remedio que esperar el tren de regreso. Exploraré el pueblo en otra ocasión.
De regreso, los campos se cubrieron de blanco rápidamente, deduzco que debido al gran tamaño de los copos.
Un videíllo: